Aceites minerales, ¿Qué son y qué ventajas ofrecen?
En el mundo de los aceites y lubricantes existe tanta variedad de productos que es difícil conocer las diferencias. Por eso, hoy vamos a hablar sobre los aceites minerales, qué son, en qué aplicaciones se usan y sus diferencias con los sintéticos.
¿Qué son los aceites minerales?
Los aceites minerales son derivados del petróleo crudo, mineral que es sometido a un proceso de destilación y refinación para obtener un semisólido con textura similar a la de la vaselina. También se conocen como petrolatum o petrolato líquido, ya que se pueden encontrar en diferentes densidades, viscosidad, textura y su composición de hidrocarburos de cadena larga varía.
Este tipo de aceites se usan desde tiempos remotos, cuando los seres humanos comenzaron a usar las primeras herramientas de construcción y transporte. En un inicio se usaban aceites vegetales, como el de oliva, cebos de grasa animal, y en la década de 1818 se desarrolló el primer lubricante mineral para motores de máquinas de vapor, que requerían un aceite más resistente ante las condiciones de trabajo en que operaban.
Después de esta primera invención se popularizaron los aceites minerales para lubricar vehículos de diésel, barcos y maquinaria industrial. Para la década de 1920, los fabricantes comenzaron a añadir antioxidantes y otros aditivos para evitar la fricción de las piezas metálicas, mejorar la viscosidad en condiciones de calor o frío extremos, e incrementar la eficiencia en general.
En general, los aceites minerales se clasifican con base en los hidrocarburos que los componen:
- Parafínicos. Se formulan con hidrocarburos no cíclicos como las parafinas.
- Aromáticos. Se formulan con hidrocarburos policíclicos aromáticos
- Nafténicos. Se formulan con hidrocarburos naftenos o clicoalcanos con sustituyentes alquílicos.
¿Cuáles son las funciones de los aceites minerales?
En general, los aceites minerales se usan para prevenir que las piezas metálicas rocen entre sí, evitar la corrosión, facilitar el movimiento de engranajes y rodamientos, y disipar el exceso de calor provocado por el roce de las piezas.
Los aceites minerales son monogrado, es decir, solo tienen un grado de viscosidad. Por esta razón se añaden aditivos mejoradores de viscosidad para incrementar su funcionalidad y eficiencia. Además de estos, otros aditivos más usados para lubricantes minerales son antioxidantes, antiespumantes, diluyentes, depresores de punto de fluidez, detergentes y dispersantes.
Con estas nuevas formulaciones, los aceites minerales tienen más funciones como la de mejorar la fluidez para mayor protección en el arranque del motor, prolongar la vida útil del motor y piezas metálicas, protección contra la oxidación, mantener limpio el sistema de aceite y prevenir el bloqueo de los filtros de aceite, disminuir el consumo de combustible y las emisiones de gases contaminantes.
Diferencias entre los aceites minerales y los sintéticos
Los lubricantes sintéticos son creados en laboratorios por especialistas en ingeniería química, por lo que sus características son diferentes a las de los minerales. Los sintéticos son más costosos por los procesos que conlleva su formulación y que son de tres a cinco veces más caros de producir que las bases minerales, pueden ser derivados del petróleo o no, cuentan con otros aditivos para incrementar su vida útil y características funcionales, además emiten pocos contaminantes.
Sin embargo, no es que un aceite sea mejor que otro, sino que se requieren para diferentes aplicaciones. Los motores y máquinas relativamente antiguas (modelos anteriores al año 1994), así como automóviles de colección o clásicos requieren aceites minerales, pero también los motores y piezas mecánicas que están expuestas al agua de forma constante, ya que el aceite sintético es soluble y se mezcla fácilmente con agua.
Las motocicletas también utilizan aceites minerales ya que cuentan con motores a dos tiempos en los que el lubricante se mezcla con el combustible.
En el caso de los motores diésel y maquinaria pesada, es importante consultar el manual del fabricante ya que muchos modelos que se encuentran expuestos al agua requieren aceites minerales por su nivel de viscosidad y por su característica de ser poco diluyentes, es decir, que no se mezclan fácilmente con el agua como los sintéticos.
Muchas personas piensan que, a futuro, los aceites minerales quedarán descontinuados y serán sustituidos por los sintéticos. Sin embargo, son muchas las aplicaciones en las que los fabricantes recomiendan el uso de lubricantes minerales con aditivos especiales para incrementar sus funcionalidades y beneficios para máquinas industriales, motores diésel, maquinaria pesada, laboratorios de investigación y vehículos clásicos.
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